Un salto. Eso fue lo que necesitó Eusebio Cáceres para volar hasta los 8,31 en Sierra Nevada. Monachil es una de las pistas preferidas para competir para muchos atletas que buscan mínimas y en esta ocasión volvió a ser talismán para uno de nuestros saltadores. El de Onil llegaba con la intención de mejorar los 8,08 que tenía como mejor marca de la temporada, y como si se hubiese reencontrado con su mejor versión, saltó para ganar la prueba por delante de Michel Torneus que fue segundo (8,30) y colocarse además líder europeo del año.

Al más puro estilo Julio César, el alicantino entonó el veni vidi vinci para llegar, ver y vencer. Después de ese primer salto decidió dejar de competir y centrarse en su siguiente parada que no será otra que el Miting de Madrid el próximo viernes 14 de julio. Así Eusebio tiene la el billete de seleccionable y, si el director técnico de la RFEA Ramón Cid no decide lo contrario, Cáceres se pondrá el dorsal para optar a todo en el Campeonato del Mundo de Londres.

Por: Carlos Domingo