Un valenciano, Quique Llopis, firmó en Glasgow la mejor actuación de su vida en un día redondo en el que corrió tres carreras y terminó a las puertas del podio de un Campeonato del Mundo. El atleta entrenado por Toni Puig logró un meritorio cuarto puesto en la final de 60 metros vallas con una marca de 7.53.
Este gran resultado, además, llega justo un año después de que el atleta de Bellreguard sufriera una caída escalofriante en el Europeo de Estambul en la final de los 60 metros vallas. Llopis se quedó tendido en el suelo y después de unos minutos muy tensos, tuvo que ser hospitalizado. Luego vino la recuperación, primero la física y luego la mental, trabajando con una psicóloga, para volver a ser el de antes.
No ha titubeado el valenciano y en verano ya se quedó a las puertas de la final del Mundial de Budapest -fue noveno-, una ascensión que ha confirmado ahora con esta cuarta posición en Glasgow, logrando la mejor marca y el mejor puesto (este, igualado con Asier) históricos de un español en los Mundiales Indoor.